conto infantil
LAGO DE LOS MONSTRUOS
Érase una vez en un pequeño pueblo cerca de Bruselas, que se llamaba
Tervuren,
un gran parque en el centro del campo y no había un bosque
gigantesca;
y que la madera, había un lago oscuro y tenebroso
en la que vivía un monstruo, que se llamaba Monsta.
Monsta había comido todos los monstruos que vivían en el lago
y todos los niños que llegan al lago
y por lo tanto tenía un vientre enorme y redonda;
era tan grande que cuando el monstruo se mudó,
arrastró al suelo y moverse mejor,
tuvo que aferrarse a las ramas de los árboles alrededor del lago,
y todos se daban de baja y casi la mitad de la altura del agua.
Monsta, el monstruo tenía hambre, hambre, ya
no había nada para comer, se había comido a todos los monstruos,
y los niños no se aborda desde la costa porque tenían miedo.
Hasta que un día cerca del lago, había un grupo
niños jugando al fútbol y un niño dio un
patear la pelota que cayó cerca de una esquina del lago.
Monsta, que cada día tenía más hambre, vio algo
ronda cerca de la esquina del lago, y pensó que podía comer.
Así que se fue a la esquina, arrastrando su vientre y
aferrarse a las ramas de los árboles y, al mismo tiempo, se tragó el balón.
Y todos vivieron felices para siempre comía árboles frutales
y la victoria, la victoria, la historia ha terminado.
Y ahora ...
SUEÑO!
Érase una vez en un pequeño pueblo cerca de Bruselas, que se llamaba
Tervuren,
un gran parque en el centro del campo y no había un bosque
gigantesca;
y que la madera, había un lago oscuro y tenebroso
en la que vivía un monstruo, que se llamaba Monsta.
Monsta había comido todos los monstruos que vivían en el lago
y todos los niños que llegan al lago
y por lo tanto tenía un vientre enorme y redonda;
era tan grande que cuando el monstruo se mudó,
arrastró al suelo y moverse mejor,
tuvo que aferrarse a las ramas de los árboles alrededor del lago,
y todos se daban de baja y casi la mitad de la altura del agua.
Monsta, el monstruo tenía hambre, hambre, ya
no había nada para comer, se había comido a todos los monstruos,
y los niños no se aborda desde la costa porque tenían miedo.
Hasta que un día cerca del lago, había un grupo
niños jugando al fútbol y un niño dio un
patear la pelota que cayó cerca de una esquina del lago.
Monsta, que cada día tenía más hambre, vio algo
ronda cerca de la esquina del lago, y pensó que podía comer.
Así que se fue a la esquina, arrastrando su vientre y
aferrarse a las ramas de los árboles y, al mismo tiempo, se tragó el balón.
Y todos vivieron felices para siempre comía árboles frutales
y la victoria, la victoria, la historia ha terminado.
Y ahora ...
SUEÑO!

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